INSOMNIO Y REPARACIÓN CEREBRAL

“Que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.” Pedro Calderón de la Barca

Por insomnio entendemos la incapacidad para dormir o a la falta total de sueño. El insomnio es frecuente, pues afecta casi a un 34% de la población adulta de forma transitoria y en torno a un 10% con carácter crónico. La pérdida de horas de sueño y/o la reducción en la calidad del mismo, habitualmente se traducen en un mal funcionamiento diurno.

El insomnio va asociado de forma invariable a un deterioro de la calidad de vida, siendo las manifestaciones inmediatas la somnolencia diurna, irritabilidad, fatiga y ansiedad. A largo plazo, el insomnio crónico conlleva un mayor riesgo de sufrir enfermedades degenerativas graves.

El sueño es un proceso reparador para el cerebro, por lo que resulta imprescindible para su correcto funcionamiento. Durante el mismo se llevan cabo importantes procesos de limpieza y reparación cerebral, que permiten consolidar los recuerdos importantes, realizar el mantenimiento y eliminar los productos tóxicos de desecho generados durante la actividad diurna. Durante el sueño, se eliminan por ejemplo, la proteína beta-amiloide y el material propio de las placas seniles, presentes en la enfermedad de Alzheimer. Sin embargo, la calidad de la reparación cerebral durante el sueño, no sólo depende del tiempo total de ensoñación. Es determinante que se preserve la calidad del sueño, a ser posible sin ser interrumpido o fragmentado, porque cualquier alteración incide en procesos cognitivos y emocionales esenciales para mantener una adecuada salud mental.
Diversos investigadores creen que los sueños tienen un papel significativo a la hora de modular el humor y las emociones. Por ejemplo, Kramer ha propuesto que el sueño REM ocasiona una explosión de excitación afectiva (aumento en las respuestas fisiológicas y la actividad del sistema límbico). Además, ha sugerido un proceso sucesivo progresivo-secuencial para los sueños a lo largo de la noche, de tal forma que la secuencia de sueños va de un contenido negativo más intenso al comienzo del sueño, hasta un contenido menos negativa hacia el final del mismo. De modo que existe cierta evidencia empírica que apoya los efectos reguladores que soñar tiene sobre el estado de ánimo y su función de reducir el nivel de estrés (Kramer, 1993 y Hoss 2013). Por su parte, desde el psicoanálisis se ha propuesto que los sueños no solo ayudan a entender y procesar emociones y conflictos mientras dormimos, sino que también desempeñan un papel similar en el estado de vigilia, al contribuir en la resolución de problemas. Hay quien ha sugerido que el soñar recuerda en muchos sentidos a la psicoterapia psicodinámica, cumpliendo por tanto una función terapéutica (Hartmann, 1995).

Otros autores han incidido en la importancia que tiene dormir bien sobre la reactivación y consolidación de la memoria. En estudios de neuroimagen por ejemplo, se ha observado que las mismas regiones que se activan durante el aprendizaje previo al sueño, se activan preferentemente durante el sueño. Existe un solapamiento sustancial de la actividad regional cerebral durante estos dos estados. En concreto, la activación de la corteza prefrontal medial y el lóbulo temporal medial, han sido implicados en el procesamiento de la memoria. Por tanto, se ha propuesto que el sueño funciona de forma similar al de los estados de reposo despierto (con disminución de los estímulos externo) siendo como una parte del continuum de la conciencia, que contribuye al procesamiento de los recuerdos pasados y prepara al individuo para el futuro (Wamsley y col., 2010; Wamsley y Stickgold, 2010; Wamsley, 2014).

Las conclusiones se basan en un estudio realizado en 2019, que fue publicado en la revista Science. La investigación se llevó a cabo en la Universidad de Boston y fue titulada "Coupled electrophysiological, hemodynamic, and cerebrospinal fluid oscillations in human sleep".
En dicho estudio concluyen que durante el sueño se producen oleadas periódicas del líquido cefalorraquídeo, que actúa bañando las neuronas mediante una serie de ondas rítmicas y pulsátiles. Los investigadores observaron que dicha dinámica está estrechamente relacionada, tanto con la actividad de las ondas cerebrales como con el flujo sanguíneo cerebral. En trabajos anteriores se había sugerido que el flujo de LCR y la actividad de onda lenta, ayudan a eliminar del cerebro las proteínas tóxicas que deterioran la memoria. Como sabemos, a medida que las personas envejecen, sus cerebros a menudo generan menos ondas lentas. Mediante éste estudio, comenzamos a entender cómo podría afectar una reducción del pulso del líquido cefalorraquídeo durante el sueño, al provocar una acumulación de proteínas tóxicas que da lugar a una disminución de la capacidad de memoria.

Otra cuestión de debate durante décadas ha sido el contenido de los sueños. En éste sentido, en los últimos avances en investigación respecto al contenido de sueños individuales, se ha demostrado que personas de diferentes culturas tienen sueños similares. Para algunos autores como McNamara, es una prueba indirecta de que dichos sueños son beneficiosos para nuestra supervivencia como especie. Aunque una posible ventaja consistiría en que dichos sueños contribuyen a facilitar las interacciones sociales, muchos científicos piensan que soñar situaciones comprometidas es una forma de ensayar de forma imaginaria la manera de evitar situaciones amenazantes durante el día.

Se comprende entonces, que los hombres suelen soñar con interacciones agresivas con otros hombres, mientras que las mujeres sueñan con interacciones verbales con ambos sexos. Otro patrón que se repite es que cuando aparecen hombres desconocidos en los sueños, ello suele indicar una agresión física.
McNamara concluye que “para los hombres, los principales competidores en sus relaciones sexuales con las mujeres son otros hombres, así que sueñan con enfrentamientos agresivos contra ellos. La presencia de desconocidos que indican una agresión física probablemente esté vinculada a que las amenazas más graves en tiempos ancestrales, provenían de ellos. Asaltantes de una tribu rival que llegaban para intentar llevarse a las mujeres y los recursos: esas eran las principales amenazas para la supervivencia”.

PSIQUIATRASEVILLA

INSOMNIO Y REPARACIÓN CEREBRAL:

1) El sueño y el insomnio:

2) Efecto del sueño sobre el cerebro.

3) Avances en la neurobiología del sueño: insomnio y reparación cerebral.

4) Temáticas frecuentes en los sueños. Origen y significado.

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