La depresión (del latín depressio, que significa ‘opresión’, ‘encogimiento’ o ‘abatimiento’) es un trastorno del estado de ánimo, caracterizado por sentimientos de abatimiento, infelicidad y culpabilidad, con dificultad para disfrutar de la vida cotidiana (anhedonia). Suele ir acompañada en mayor o menor medida de ansiedad.
El origen de la depresión es multifactorial, influyendo factores biológicos, genéticos y psicosociales. Los factores ambientales que aumentan el riesgo de depresión son el fallecimiento de un ser querido, una mudanza, conflictos familiares, una intervención quirúrgica, estrés psicosocial, intolerancia alimentaria, inactividad física, obesidad, tabaquismo o drogadicción. Entre los factores psicosociales destacan el estrés y ciertos sentimientos negativos ( una decepción sentimental, contemplación o vivencia de un accidente, asesinato o tragedia, malas noticias, contexto social, aspectos de la personalidad, una experiencia cercana a la muerte) o una elaboración inadecuada de un duelo.
