SEÑALES QUE INDICAN LA NECESIDAD DE BUSCAR AYUDA PSICOLÓGICA

SEÑALES QUE INDICAN LA NECESIDAD DE AYUDA PSICOLÓGICA


La salud mental es una variable difícil de cuantificar pero existen indicios que nos han de hacer pensar en buscar ayuda psicológica. Por desgracia, muchas personas tienen dificultades para reconocer su malestar, otras son reacias a asumir que tienen un problema y muchas otras, prefieren invertir su tiempo en actividades placenteras, creyendo que posponiendo el problema éste se arreglará solo. Lo cierto es que aquellas que entienden que tienen un problema psicológico que interfiere en sus vidas y asumen la responsabilidad de tratar de solucionarlo, son las que a la larga tienen vidas más plenas y gozan de mayor nivel de satisfacción general.


En sentido genérico, una persona profana al mundo de la psicología tendrá dificultades para entender lo que le pasa, pero al menos podrá saber de forma intuitiva que algo va mal. Habitualmente nos damos cuenta de ello porque sentimos de forma vaga que nuestra vida está estancada, no progresa, tenemos dificultades interpersonales en la pareja o la familia y en definitiva, sufrimos más de la cuenta. Sin embargo, todo ésto es muy impreciso, de modo que cuáles son las señales que nos deberían hacer pensar que necesitamos apoyo psicológico?


MOTIVOS PARA BUSCAR AYUDA PSICOLÓGICA: 


1) Inestabilidad emocional o sufrimiento personal importante:


El sufrimiento psíquico podría ser normal en algunas fases de la vida, pero cuando se prolonga en el tiempo, genera gran malestar, provoca un deterioro severo de las relaciones personales y llega a afectar al mundo laboral, es indicativo de que la situación requiere una solución. La inestabilidad emocional, un aumento serio del nivel de ansiedad, tristeza profunda, aparición de ideas de suicidio o un sufrimiento severo y continuado, han de hacernos sospechar que tenemos un problema psicológico grave. Buscar un experto con quien compartir la carga y trabajar el problema desde un punto de vista psicológico, es una buena forma de empezar a solucionarlo.


2) Un acontecimiento reciente estresante nos pone en peligro:


La vida está repleta de experiencias; algunas son buenas, otras regulares, pero también las hay malas e incluso desastrosas. Aunque el impacto psicológico de una vivencia determinada tiene un componente subjetivo importante, algunas experiencias en particular tienen gran impacto sobre la salud mental, en la medida en que nos desequilibran al provocar gran malestar emocional. Una agresión física, una agresión sexual, una experiencia que pone en peligro la vida, un abandono precoz, una situación que amenaza o cuestiona nuestra seguridad, puede generar un desequilibrio intenso que requiera ayuda psicológica.


3) La cercanía de la muerte:


La presencia cercana de la muerte, ya sea por el fallecimiento de un ser querido o bien el desarrollo de una enfermedad física grave, suele generar malestar psicológico intenso y duradero. Iniciar una terapia psicológica puede ayudarnos a profundizar en el tema de la muerte y obtener una perspectiva distinta o al menos, suavizar nuestra percepción de la propia muerte o la de un ser querido. Por tanto, es habitual que los trastornos mentales pueden relacionarse con enfermedades médicas, porque es difícil mantener una mente sana si el cuerpo está enfermo ("mensa sana in corpore sano" , Décimo Junio Juvenal, siglo I AC).


4) Resolver limitaciones de la personalidad que nos hacen sufrir:


A veces, no hay por qué presentar un trastorno o malestar grave para ir al psicólogo. No hace falta ser extraordinario para encontrarse bien, pero si es necesario comprenderse a uno mismo. Las personas con capacidad para disfrutar de la vida, son habitualmente aquellas que se entienden bien a sí mismas y se aceptan tal como son. Asumen sus limitaciones sin complejos, potencian sus fortalezas y buscan de forma premeditada entornos laborales compatibles con su personalidad y aspiraciones. Por tanto, acudir a terapia de forma continuada no ha de ser necesariamente porque alguien está gravemente enfermo desde el punto de vista mental. A veces se trata simplemente de buscar el autoconocimiento con el fin de rendir más, vivir mejor o simplemente, sufrir menos.


5) Resolver un conflicto interpersonal que deteriora la autoestima o un vínculo importante:


Es importante asumir que las personas no vivimos solas, por lo que nuestras relaciones personales son determinantes respecto a cómo nos encontramos ("yo y mi circunstancia", Ortega y Gasset, 1914). Por consiguiente, el cuidado de los vínculos claves resulta determinante para vivir una vida plena. Cuando a lo largo de la vida, nos enfrentamos por cualquier causa a un deterioro de un vínculo fundamental, es habitual que nuestro mundo se venga abajo. En éstos momentos, entender las señales que nos envía el propio cuerpo y escuchar los mensajes que nos comunican nuestra emociones, ayuda a comprender lo que nos está pasando. En éstas situaciones, buscar apoyo psicológico con un profesional cualificado, puede marcar la diferencia entre mejorar o sufrir un importante malestar emocional prolongado.


CONCLUSIONES: 

En definitiva, resulta decisivo entender cuándo nos hace falta ayuda psicológica y dónde buscar un terapeuta profesional. Sin embargo, encontrar el camino no es recorrerlo. De modo que hace falta paciencia y esfuerzo para comprender primero, afrontar después y resolver más tarde la propia problemática. 


CONSULTA DR PONCE, MÉDICO PSIQUIATRA.


BIBLIOGRAF́ÍA:

https://www.semana.com/vida-moderna/articulo/cuando-debe-buscar-ayuda-de-psicologos-estas-son-las-senales/202245/


https://www.nami.org/About-Mental-Illness/Warning-Signs-and-Symptoms


https://www.anthem.com/coronavirus/blog/well-being-and-community/mental-heath-signs-that-someone-may-need-help


https://www.makeuk.org/insights/blogs/mental-health-in-the-workplace-how-to-recognise-the-early-signs-that-someone-may-need-support