TOCAR FONDO PARA SER MÁS FUERTE

TOCAR FONDO PARA SER MÁS FUERTE.



  1. Tocar fondo.


Habitualmente nos movemos buscando el bienestar y detestamos las experiencias displacenteras, pero són éstas últimas las que más nos enseñan. Las personas que aprecian lo que tienen no han nacido así, son la consecuencia de vivencias difíciles que les han hecho volverse más fuertes.


“Tocar fondo” se utiliza frecuentemente para aludir a un estado de intenso malestar emocional que es difícil de tolerar. Realmente, ésta expresión es una afirmación popular que no se corresponde con ninguna definición académica en particular. Cuando se alcanza éste estado, es un momento excelente para reflexionar sobre las propias necesidad y aprender a resolverlas. El enfrentarse a uno mismo es una fabulosa oportunidad para comprender cuál es el sentido que tiene la propia vida.


Las personas que se encuentran en éste estado, suelen sufrir cierta desidia y desinterés global. También desarrollan cierto temor a los cambios y muchas entran en una fase de autocrítica, en la que se cuestionan a sí mismas. No es infrecuente la aparición de sentimientos de tristeza, desánimo e impotencia, que impide planificar objetivos a largo plazo e impulsa hacia el inmovilismo.


  1. Fases para salir de ese estado.



Hace falta poner en marcha una serie de medidas para alcanzar una mejoría que tardará en aparecer. Los pasos son los siguientes: 

1) Comprender el origen del problema es siempre el primer paso para encontrar una solución. Hay que entender que las situaciones de intenso malestar, habitualmente tienen una duración más prolongada de lo esperado. Cuando la situación resulta inmanejable, puede ser aconsejable consultar con un profesional de la salud.

2) Elaborar un plan. Una vez entendida la causa es importante dilucidar cuál es la necesidad interna que hace falta resolver. Cuando queda claro qué es lo que nos hace falta, hay que sobreponerse al dolor y esforzarse por continuar.

3) Buscar alianzas. Hablar del problema puede ser fuente de alivio pero es importante hacerse consciente que ésta acción no resuelve de forma inmediata el problema. Crear alianzas en el día a día puede ayudar a compensar el malestar.

4) Analizar los hechos de forma objetiva y eliminar el negativismo. Cualquier fracaso es una gran oportunidad para volverse más fuerte y avanzar más rápido. Es necesario desprenderse del fatalismo para ver los aspectos positivos que sin duda existen, en cualquier situación por grave que sea.

5) Aprender a convivir con uno mismo en solitario. Disfrutar en solitario es algo que pocas personas pueden aprender a hacer y sin embargo, resulta capital para afrontar muchas de las situaciones más difíciles de la vida. Tocar fondo es una excelente oportunidad para aprender a salir adelante con los propios déficits y virtudes.

6) Reorganizar las actividades cotidianas. Los momentos de malestar son un buen momento para ocupar el tiempo con actividades laborales y de ocio que ayuden a llenar la sensación de vacío. Llenar el tiempo con responsabilidades es una excelente forma de mantener la mente ocupada y reducir el exceso de reflexión, que a partir de un punto resulta contraproducente. El abuso de la autocrítica y los autorreproches no conducen a nada. Se trata de pensar al principio para actuar después.

7) Cambiar la perspectiva. Es posible cambiar el punto de vista sobre los sucesos externos y adoptar posiciones más flexibles sobre uno mismo y los demás. Es importante aprender a relativizar la importancia de aquello que nos sucede a diario y aprender a disfrutar con las pequeñas cosas.

8) Prevención de situaciones desagradables. Las personas que han tocado fondo y han sido capaces de realizar un análisis eficaz de aquello que les ha provocado un malestar intenso, están mejor preparadas para anticiparse a situaciones similares. Ello les hace menos vulnerables a la hora de permitir que la misma situación se repita en el futuro.

9) Fortalecimiento de los vínculos importantes. Tocar fondo es un potente estímulo para una mejor selección de las personas que formen parte de la propia vida, con el fin de evitar errores del pasado.

10) Mayor grado de autoconocimiento. En esencia, sufrir un momento de gran malestar es una extraordinaria oportunidad para alcanzar un mayor grado de conocimiento sobre uno mismo y los demás.

C) Volver a levantarse.

La primera cosa que hay que saber es que levantarse más fuerte lleva tiempo, por lo que no querer correr más de lo que permite la situación es una actitud inteligente. Durante el tiempo que toca sufrir, no tomar decisiones precipitadas es una máxima que conviene respetar. Debemos saber que los pensamientos y las conclusiones pueden ser rápidas, pero los cambios emocionales llevan mucho más tiempo en generarse y eso depende aceptar aquello que detestamos.

En el proceso de mejoría, la ansiedad y la depresión son un primer estadío, pero tras un largo peregrinaje aparecen la rabia y la ira. Es tan solo cuando aparece la aceptación cuando se comienza a comprender realmente a nivel emocional el proceso y ese es el momento que indica que la mejoría puede estar próxima. Naturalmente, la causa es importante para llegar a encontrar una solución, pero también lo es la edad de la persona y las características personales. Por ello, no hay soluciones únicas para todos los individuos y cada caso es diferente. Al final, no queda otra que volver a levantarse y para quien lo consigue, la vida suele ser mucho más fácil porque en el camino, lo habitual es hacerse más fuerte.



Dr Miguel Ponce, psiquiatra


CONTRATAR CONSULTA





BIBLIOGRAFÍA:


https://psicologiaymente.com/clinica/como-tocar-fondo-salir-fortalecido

https://www.psicologia-online.com/que-hacer-cuando-tocas-fondo-emocionalmente-y-como-recuperarse-6510.html

https://www.vogue.es/articulos/tocar-fondo-ayudar-nivel-emocional